Egresados/as y profesionales de la institución lograron hacer frente al desastre que generó el terremoto de 1944 en la provincia, poniendo en valor sus conocimientos e ingenio.
La Facultad de Ingeniería (FI) se ubica como la más antigua de las unidades académicas que integran la Universidad Nacional de San Juan, que fue creada en 1973. A fines del siglo XIX, surgieron en San Juan los estudios superiores vinculados con la minería, reconociéndole así méritos para ser considerada una institución centenaria en la provincia, la región y el país. Además, es importante destacar que fueron actores activos en la reconstrucción de San Juan luego del terremoto de 1944, desafiando las habilidades, los conocimientos e ingenio de egresados y profesionales.
La cronología de su creación
El 9 de diciembre de 1864 se creó el Colegio Nacional de San Juan, cuyos cursos se iniciaron el 16 de marzo de 1865, con el agregado de una clase especial de Mineralogía y el 9 de diciembre de 1871 se creó el Departamento de Minería, anexo al Colegio Nacional, en donde se podía cursar la carrera de Ingeniería de Minas.
En 1873 se separa del Colegio Nacional, en 1876 se establece la Escuela Mixta de Ingenieros Civiles y de Minas, y en 1877 comienza a funcionar la Escuela Nacional de Ingenieros de San Juan.
El 21 de marzo de 1939 se crea la Universidad Nacional de Cuyo, integrada por: Facultad de Filosofía y Letras (Mendoza) Facultad de Ciencias, integrada por la Escuela de Ciencias Económicas (Mendoza), Escuela de Agronomía (Mendoza) y la Escuela de Ingeniería (San Juan). Además, integraban la Universidad Nacional de Cuyo, la Escuela de Minas e Industrial y la Escuela de Artes y Oficios (ambas de San Juan), entre otras.
El 16 de agosto de 1939 se iniciaron los cursos de la Universidad Nacional de Cuyo y, el primer director de la Escuela de Ingeniería fue el Ing. Rogelio Boero.
El 29 de noviembre de 1945 la Asamblea Universitaria transformó todas las Escuelas en Facultades, hecho que se concretó a través del Decreto PEN Nº 25621/46 y la Ord. 197/47 que transformó la Escuela en Facultad de Ingeniería y Ciencias Exactas, Físicas y Naturales y que, además, dispuso que la Escuela Industrial Domingo Faustino Sarmiento y la Escuela de Artes y Oficios dependieran de la Facultad de Ingeniería.
El 10 de mayo de 1973, por Ley 20367, se creó la Universidad Nacional de San Juan, integrada, por la Facultad de Ingeniería y Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, la Universidad Provincial Domingo Faustino Sarmiento y el Instituto Nacional del Profesorado.
Por Ordenanza 24 del 10 de noviembre de 1983, se produce la última transformación, quedando conformada la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de San Juan.
La Facultad de Ingeniería fue la piedra angular de la Universidad Nacional de San Juan. El 18 de mayo de 1862, durante la gobernación de Domingo Faustino Sarmiento, se creó el Colegio Preparatorio para la Universidad. Desde la cátedra Mineralogía de esta institución pública, se organizó la Escuela de Minas. Aquella fue el fundamento de la actual Facultad de Ingeniería.
Faro de atracción para investigadores que llegaron de distintos lugares del mundo durante el siglo XIX, punto de partida de la reconstrucción y el despegue socio-económico provincial en el siglo XX, en la actualidad, esta unidad académica es un centro de enseñanza y referencia científica, de gran prestigio internacional.
El rol de la Facultad en la reconstrucción de San Juan
El terremoto de 1944 destruyó la mayor parte de los edificios de San Juan y dejó un saldo de 10 mil muertos. “Si uno pudiera olvidarse de los muertos, podría decirse que el terremoto sacó a la luz elementos muy importantes para San Juan. Capacidad de trabajo, tenacidad. Además, al romper las viviendas de ricos y pobres, igualó a todos los habitantes. Y la Facultad supo responder muy bien a lo que fue aquella catástrofe”, afirma el ex gobernador de San Juan, José Augusto López, en una nota de Silvia Marcet, directora de Prensa de la FI en El Nuevo Diario.
Es así que egresados y profesionales de la Facultad lograron hacer frente a la reconstrucción de la provincia, poniendo en valor sus conocimientos y trabajando por su patria.
Lo humano
Muchos nombres que integraron la Facultad en esa época quedaron en el recuerdo de estudiantes y colegas. Según cuenta Marcet, tanto profesores como autoridades cumplían un rol protector y formador para con los alumnos.
Otro aspecto comentado por Marcet, entre tantos a resaltar, es que se logró un gran vínculo en las aulas. En ese sentido, decanos y profesores llegaron a firmar la garantía del alquiler a los alumnos que llegaban de otra provincia o país.
“Eran épocas en que se convivía en las aulas, se compartía todo. Si bien los profesores eran eminencias, las aulas tenían la mitad de los alumnos que tienen hoy, y por eso la relación que se establecía con los alumnos era muy cercana” recordó Carlos Rudolph, ex decano de la Facultad de Ingeniería.
Luchas y revolución
“Los años que viví como estudiante de la Facultad fueron muy lindos porque eran los de la juventud. Pero además porque los jóvenes eran muy comprometidos con las ideas políticas, con ganas de luchar, de ganar la democracia. Las ideas sobre la lucha armada no eran un sistema de conversación subterránea como se piensa hoy, sino que se argumentaba en cada lugar. Yo era simpatizante del MID y discutía con mis compañeros, les decía que un baño de sangre no era la solución”, indica Julio Cesar Carmona, vicepresidente del Centro De Ingenieros.
Fuente: Prensa SECCOM-UNSJ