Luego de obtener media sanción en la Cámara de Diputados, la Ley Bases entró en un terreno más pantanoso en Senadores. El debate lleva dos semanas y se transmite vía YouTube con un importante caudal de curiosos siguiendo el ida y vuelta. Son tres los representantes por provincia y en San Juan dos dejaron en claro qué van a hacer cuando les toque alzar las manos. El libertario Bruno Olivera apoyará el cuerpo normativo de su conductor y la camporista Celeste Giménez votará por el “no”, según lo adelantó en sus redes sociales. El voto del ex gobernador Sergio Uñac sigue siendo una incógnita. Cuáles son los tres caminos que puede seguir el pocitano, en el medio de un tire y afloje que lo ubica en un lugar clave dentro del debate.
Los peronistas, amparados bajo el paraguas de Unión por la Patria, cuentan con 33 voluntades –una de ellas de Uñac-. La ambición del sector era dejar sin Ley Bases a Javier Milei, juntando 4 votos entre aquellos legisladores escrachados por la Libertad Avanza. Pero lo cierto es que, por estas horas, todo apunta a que “los dialoguistas” están más cerca de aprobar la ley en general, aplicándole más modificaciones, que de rechazarla.
La Ley Bases es un articulado que plasma y le da un marco legal al rumbo político y económico que le quieren dar los libertarios al país. Desde una reforma previsional que reemplaza la jubilación sin aportes por pensiones hasta una metamorfosis fiscal son algunos de los puntos fundamentales de lo que hoy están en discusión. Y es en este punto donde aparece el RIGI, un régimen que otorga beneficios impositivos y hasta legales a grandes inversiones (de más de 200 millones de dólares).
Para el gobernador Marcelo Orrego la aprobación del RIGI es clave para lograr que se destraben grandes inversiones mineras, entre ellas Josemaría, Pachón y Los Azules. Se podría decir que hay hasta una guerra de comunicados: las entidades industriales y agrícolas pequeñas no están muy convencidas; mientras que los grandes industriales proveedores mineros y las multinacionales mineras empujan su aprobación. Se suman a este lote, los inversores en energías alternativas.
Por lo que representa el RIGI para San Juan, no fue muy sorpresivo que los diputados nacionales que responden a Uñac hayan votado a favor de la iniciativa y en contra de la Ley Bases en general. Al analizar la letra chica del paquete normativo del RIGI, era claro que el diputado y presidente de la Comisión de Minería, Walberto Allende, haya dado su bendición como así también Fabiola Aubone y Jorge “Koky” Chica.
Los votos positivos al RIGI de los legisladores uñaquistas fueron los que condujeron a la conclusión de que Uñac iba a votar en la misma línea cuando la Ley Bases llegara al Senado: en contra de la ley en general y a favor del RIGI. Pero lo que era una certeza hace dos semanas, hoy no lo es.
Son tres los caminos que puede seguir el pocitano, algunos con menos probabilidades. Lo que sí se sabe es que todos generarán consecuencias desde lo político.
Si Uñac vota en contra de la Ley Bases en general y a favor del RIGI, estaría generando una herida –que deberá cicatrizar- con los compañeros de interbloque, la mayoría de corte más kirchnerista. Es más, se lo pudo ver en los debates de comisión sentado al lado de Juliana Di Tullio. La decisión que respaldaría a San Juan, lo alejaría de la potencia que implica integrar la bancada más poderosa en número dentro del Senado.
Es más, si se tienen en cuenta sus últimas publicaciones en las redes sociales, el voto de Uñac parece estar más cerca del rechazo total que de la línea de conducta que siguieron sus legisladores nacionales. Recibió en su despacho a representantes de Amas de Casa y de distintos sindicatos, todos dirigentes que han manifestado enérgicamente su posición en contra de la ley mileista. Alzar la mano en contra, lo acerca a los senadores peronistas, lo ubica como fuerte oposición al gobierno nacional pero lo posiciona de manera incómoda frente a la política minera que siempre defendió a lo largo de los ocho años de su gestión.
La opción más improbable es que Uñac vote a favor completamente de la Ley Bases. Implicaría salir de Unión por la Patria y estar cerca de los dialoguistas, entre los cuales se encuentran Martín Lousteau, Pablo Blanco, Alejandra Vigo, Carlos Camau Espínola, Edgardo Kueider, Guadalupe Tagliaferri, Mónica Silva y Juan Carlos Romero, con quienes está más cerca ideológicamente, pero no en el terreno político.
La Ley Bases no lograría dictamen esta semana y el proyecto recién podría debatirse en al recinto el jueves 30 mayo. El voto de Uñac será clave.