Abril llega con aumentos: a partir de este lunes, los combustibles suben en torno al 5%, lo que implica un incremento acumulado del 106% en lo que va de la gestión de Javier Milei. Así, el litro de súper en la Ciudad de Buenos Aires pasa a valer, como mínimo, $834. La premium supera los $1.000, mientras que el gasoil común pasa a $879.
El ajuste se debe a la actualización de impuestos al combustible líquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC), suspendidos en julio de 2021 por decisión de Alberto Fernández. En febrero de este año, a través del decreto 107/2024, Milei dispuso un cronograma para revertir el congelamiento en dichos impuestos, con ajustes previstos para el 1° de marzo, el 1° de abril y el 1° de mayo de 2024.
Como suele ocurrir en estos casos, el aumento generó largas filas en las estaciones de servicio durante el fin de semana, donde los conductores buscaron aprovisionarse de combustible con el precio anterior.Sin embargo, esa concurrencia masiva no logra ocultar la caída interanual del 7,3% en la venta de naftas en febrero, por la crisis y la disparada de los precios. Según el sitio Surtidores, la caída se sintió especialmente en los productos premium, que en el caso de la nafta fue de casi el 23% y en el gasoil del 8,25%. Se trata de la baja más pronunciada desde 2019, pese a que el parque automotor era entonces mucho más reducido.