

En el informe Perspectivas Económicas Mundiales del Fondo Monetario Internacional (FMI) referidas al Hemisferio Occidental dado a conocer este viernes en Washington, el organismo internacional ponderó el programa de gobierno de Argentina, pero le reclamó al presidente Javier Milei que uno de los puntos a fortalecer sea la acumulación de reservas: “Se necesitan esfuerzos sostenidos para mantener el ancla fiscal, fortalecer el marco de gestión monetaria y de liquidez e impulsar reservas para facilitar el acceso duradero a los mercados internacionales de capital”.
En el documento, se advirtió que «la economía mundial enfrenta importantes cambios de políticas y shocks persistentes en medio de una incertidumbre inusualmente alta» y se deslizó que «en este contexto, se espera que el crecimiento en América Latina y el Caribe se vea afectado por diferentes exposiciones al comercio global y a la dependencia de las remesas, las materias primas y los mercados globales de capital».
No obstante, se ponderó las reformas estructurales que está llevando la presidencia de Javier Milei y anticipa un crecimiento del PIB argentino de 4,5% para el año en curso con una inflación de 28%. También, indicó que «se necesitan esfuerzos sostenidos para mantener el ancla fiscal, fortalecer el marco de gestión monetaria y de liquidez e impulsar reservas para facilitar el acceso duradero a los mercados internacionales de capital».
En referencia al Gobierno nacional, el FMI destacó que “desde diciembre de 2023, la administración Milei ha implementado un ambicioso paquete de medidas orientadas al mercado, reformas para impulsar la productividad y el crecimiento» y menciona que estas reformas se han centrado en eliminar barreras arraigadas en el comercio, levantando estrictas regulaciones financieras, de productos y del mercado laboral, y promulgando cambios en la gobernanza.
En esa línea, señaló que Argentina ha enfrentado importantes impedimentos estructurales al crecimiento que empeoraron durante el período 2010-22 como resultado de restricciones estrictas y altos precios, tasas de interés y divisas, controles monetarios y regulaciones en el mercado laboral que desalentaron el empleo formal y aumentaron el costo de hacer negocios junto con un deterioro de la calidad regulatoria, la eficacia gubernamental y la gobernanza y transparencia generales.
Entre las medidas del Gobierno identifica las referidas a la liberación comercial y puntualiza que la gestión Milei ha reducido numerosas (y altamente discrecionales) tarifas y barreras comerciales no arancelarias, alivió la mayoría de las restricciones cambiarias (aunque algunas se reintrodujeron recientemente), los procedimientos fueron aduaneros simplificados a través de la digitalización y regulaciones mejor alineadas con normas internacionales.
También, destaca un nuevo régimen de inversiones (RIGI) ha garantizado compromisos por más de u$s15 mil millones en inversión extranjera directa, principalmente en energía y minería.