La virtud del descubrimiento paleontológico es que el ejemplar está completo, tiene grandes dimensiones y un nivel de preservación excelente. Sin embargo, no es el más antiguo que se ha encontrado en la provincia.
Un estudiante de Geología de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de San Juan, Ayrton Rodríguez, oriundo de Jáchal, realizaba una actividad del Club Andino Jáchal y logró detectar un fósil que se encontraba en una cañada muy grande en la zona de La Ciénaga en Huaco.
Víctor Hugo Contreras, investigador de la UNSJ, comentó que Rodríguez informó a los profesionales sobre el hecho y así se inició la campaña de rescate paleontológico.
Contreras es curador de la colección paleontológica del Instituto de Geología y una de sus funciones es justamente recuperar, rescatar, estudiar y promover la difusión del patrimonio paleontológico de la provincia de San Juan. “En este proceso, cumplimos con aquellos objetivos de recuperar el material en sitios donde puede ser destruido por agentes naturales o puede ser removido por personas no idóneas para hacer ese tipo de trabajo”, aclaró Contreras.
El hallazgo corresponde a un molusco de mar, cefalópodo nautiloideo, identificado preliminarmente como Curtocera kayseri, un ejemplar que data del Ordovícico Medio, con una antigüedad aproximada de 470 millones de años. “Coloquialmente, es un caracol de grandes dimensiones y de hábitos totalmente marinos, son los nautiloideos, son moluscos que viven exclusivamente en el mar, tanto en el pasado como actualmente”, explicó el investigador.
En este momento se están iniciando los trámites para que paleontólogos/as especialistas analicen y corroboren la antigüedad del fósil. Primeramente, los especialistas determinaron que se trata de un molusco que habitó los mares, este era una forma conocida pero solo por fragmentos. La virtud de este hallazgo es que está completo, tiene grandes dimensiones y tiene un nivel de preservación excelente. Sin embargo, no es el más antiguo que se ha encontrado en la provincia.
Las colecciones de estos fósiles son el elemento tangible que queda como testimonio de las interpretaciones de estudios geológicos y paleontológicos. Contreras indicó que esto es fundamental porque a partir del estudio se pueden contrastar las ideas e interpretaciones que hacen los distintos investigadores.
Fuente: Prensa SECCOM-UNSJ