La Cámara Argentina de la Industria del Juguete, en conjunto con fuerzas del cuerpo de Operaciones Especiales de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires y la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (Ufema) realizaron operativos en diferentes puntos de la Ciudad de Buenos Aires para identificar juguetes peligrosos, que no cumplen con la Norma Técnica de Seguridad o que presenten irregularidades en el estampillado de la AFIP, en el caso de los importados.
Durante esta semana, y en contexto de las próximas fiestas, se realizaron inspecciones en veinte locales de venta de juegos, juguetes y globos con el objetivo de incautar productos que no brindan garantías de haber sido certificada su seguridad, requisito obligatorio para su comercialización.
Como resultado de los operativos, fueron secuestradas decenas de miles de juguetes y globos que no cumplían con el requisito de etiquetado exigido en la norma técnica de seguridad que se debe cumplir para poder certificar y comercializar los productos, según reportó hoy la Cámara en un comunicado.
“Nuestra prioridad es que los niños y niñas jueguen de manera segura, con juguetes que cumplan las normas de seguridad”
Cámara Argentina de la Industria del Juguete
Al respecto, desde la Cámara Argentina de la Industria del Juguete recordaron que “muchas veces, podemos comprar sin saberlo juguetes ingresados por contrabando que presentan peligros para la salud y la seguridad, y nuestra prioridad es que los niños y niñas jueguen de manera segura, con juguetes que cumplan las normas de seguridad”.
En esa línea, sostuvieron que “cuando eso no sucede, la Cámara denuncia a quienes comercializan productos con riesgo para la salud, quedando imputados por el artículo 201 del código penal”.
Además, señalaron que “Argentina tiene el problema estructural del contrabando y falsificación de juegos y juguetes que son producidos con plastificantes prohibidos o plásticos que pueden contener elementos cancerígenos que migran a los organismos de los niños, pudiéndoles provocar serios problemas de salud o desprender partes pequeñas y provocar la asfixia”.
Por otro lado, desde la Cámara señalaron como una de las principales precauciones que “el envase primario debe presentar el logo de seguridad que consta de una “S” negra dentro de dos figuras circulares. Este logo certifica que el producto aprobó satisfactoriamente los ensayos físico-mecánicos y toxicológicos de los materiales y pinturas, relacionados con la presencia de metales pesados prohibidos como plomo y cadmio”.