Por SRSur News Agency-Ricardo Sarmiento
El día después de las PASO, la economía argentina y la política conducen al país a crisis tal vez mayores a las conocidas en la historia de la Nación.
A juzgar por los primeros efectos de los resultados de las PASO, Argentina avanza hacia el abismo en un proceso abierto por la impericia de la política económica y por el voto a favor del candidato ultraliberal de la Libertad Avanza, Javier Milei, que ya muchos califican como anarcocapitalista e incluso tildan de trotskista de derecha.
La propuesta política de Milei es un voto tan antisistema como lo es el voto a los partidos trotskistas que son los únicos que han quedado sumidos en el ultraizquierdismo y que, inclusive, tienen organizaciones armadas, no expuestas abiertamente.
En el oficialismo también se ha dispuesto una devaluación superior a 22% para el dólar oficial (operó el viernes a $290) que ya cotiza a $ 365 y esto impulsó al dólar blue de 605 pesos en el cierre del viernes a 690 pesos en el valor teórico pero en verdad está cotizado al momento de cierre operativo de pequeños vendedores a 700 pesos.
El gobierno aumentó los impuestos sobre las tarjetas de crédito y el dólar tarjeta opera hoy en 731 pesos.
Argentina no quiere reconocer que estamos avanzando irremediablemente, o que ya estamos lanzados, hacia una hiperinflación.
El Banco Central modificó la tasa de referencia para llevarla a 118% con lo que la Tasa Efectiva Anual está en 229%.
Los saldos impagos o postergados de las tarjetas de créditos del consumidor asalariado saltaron a niveles de intereses “compensatorios” y “punitorios” impensables hace una semana que generarán mayores tasas de morosidad y un quiebre en los esquemas de las economías domésticas.
El lunes posterior a las PASO inició la jornada comercial con los remezones propios de la incertidumbre.
En los casos en lo que los comerciantes venden algunos productos pensando en tener caja para pagar sueldos e impuestos, esta mañana, por ejemplo, los colchones 22%. Los mayoristas el rubro indumentaria anunciaron a los comercios minoristas que apliquen aumentos con un piso de 25% pero no entregan productos al por mayor. Un buen negocio de provincia recibe, por envío, entre 50 y 100 unidades en el caso de los colchones.
Los mayoristas de prendas de vestir no entregan mercaderías hoy y algunos mayoristas de menor porte, más sensibles al tipo de cambio por una cuestión de escala económica, están cerrados hoy.
Calzado importado no se vende. Almohadas importadas se venden sólo mediante pago efectivo contado con más de 20% de recargo sobre el precio del viernes último.
Las casas de cámping y deportes, con casi todos sus productos importados, van a cerrar por unos días en espera de alguna.
Según fuentes del mercado, Levy’s, con sus jeans y camperas que son algunas de las más apreciadas por los compradores, hoy no tenía precio fijado para sus productos y por lo tanto no entrega mercadería.
En el microcentro porteño, los locales de venta de la tradicional calle Florida subieron todos los precios más de 25% y venden a los turistas reconociendo un dólar a 700 pesos para que los potenciales compradores no vayan a cambiar sus divisas a los arbolitos que se han multiplicado exponencialmente en los últimos dos meses.
El voto a Milei entre jóvenes, encuentra una de las primeras explicaciones en la motivación irracional de los grupos de pertenencia o “tribus” adolescentes que actúan por efecto imitación. “Yo voté a Milei porque lo votan mis amigos”, dicen algunos adolescentes.
En otros sectores de la juventud, más perceptivos a las ideas de izquierda, anticipan que en la primera ronda electoral votarán a Sergio Massa para evitar un avance de Milei a quien consideran un “nazi”, tomando este vocablo desde SRSur News Agency sin ninguna intención de vanalizar el holocausto sino como simple reflejo de testimonios reales.
El nuevo mapa político emergente de las PASO 2023 en Argentina.
Hay quienes con más memoria histórica, comparan el descontrol discursivo del nuevo protagonista de la escena política argentina con el Hitler de 1931 electo por el voto popular, que luego se rodeaba de mujeres para una foto histórica que es frecuentemente censurada por los algoritmos de Facebook a pesar de que es necesario en este tiempo refrescar la memoria de los episodios más trágicos de la humanidad, sólo del último siglo.
Algunos periodistas televisivos hoy comparan a Milei con el ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pero no aclaran que Argentina, a pesar de sus 40 años de democracia, no tiene la solidez de las instituciones republicanas de los Estados Unidos.
Para Argentina se abrió un capítulo en que la ya consagrada candidata de la oposición, Patricia Bullrich, deberá pensar muy minuciosamente sus mensajes de campaña hasta el próximo 22 de octubre en que se realizará la Elección Presidencial 2023, en primera vuelta.
Tendrá que competir con un discurso explosivo de un Milei que promete dinamitar el Banco Central y con ello, apunta a marcar posiciones antisistema que lo unen en un hilo de muy finas diferencias con las organizaciones trotskistas que siguen ejerciendo el viejo apotegma de “cuanto peor, mejor”.
Son pocos los Estados que no tienen Banco Central. Uno de ellos es Panamá. Los otros son paraísos fiscales donde se lava dinero y se licúan operaciones ilegales.
Para destruir el Banco Central se requiere una reforma constitucional en la que se elimine el rol que se asigna a la autoridad monetaria la tarea de preservar la moneda nacional.
En este lunes, Argentina avanza hacia el abismo. El país se muestra en un más nítido avance hacia la hiperinflación y hacia el autoritarismo populista desmesurado desde el liberalismo a ultranza que tampoco es practicado por ningún país.
El país de los extremos, desde la corrupción institucionalizada, al anarcocapitalismo, es un pasaje que probablemente sólo resistan quienes han vivido hiperinflaciones sucesivas, golpes de Estado crónicos, democracias débiles, y demagogia de izquierda y de derecha.