

El Departamento de Protección Civil informó que 260 personas fallecieron desde ayer, el número más bajo desde las 175 registradas el 14 de marzo y que elevaron a 26.644 el total de decesos en el país desde que se inició la pandemia.
Si bien la cantidad de personas infectadas tuvo un ligero aumento por primera vez en la semana, con 256 enfermos que llevaron el total a 106.103 positivos, el país consolidó la tendencia a la baja en la cantidad de internados y en terapia intensiva, así como la mayor cantidad de curados que de nuevos contagiados, que sostiene desde hace días.
En ese contexto, Conte afirmó que a partir del 4 de mayo se flexibilizará la cuarentena vigente desde el 10 de marzo e Italia iniciará la “fase de convivencia con el coronavirus”, en la que será crucial “mantener al menos un metro de distancia”.
“Desde el 4 de mayo y hasta el 18 se mantendrán los requisitos de hasta ahora para movilizarse dentro de una región, y se agrega la posibilidad de visitar familiares, siempre con el uso de barbijos y sin aglomeraciones”, dijo Conte en un mensaje televisado.
Para el 18, agregó, está prevista la apertura de comercios de venta al público y de museos, así como el permiso para que se reanuden los entrenamientos de equipos en canchas deportivas.
“Bares, restaurantes, peluquerías y centros de masaje abrirán el 1 de junio”, indicó, aunque desde el 4 de mayo los dos primeros rubros “podrán trabajar con la modalidad para llevar, sin aglomeraciones, y la comida no se comerá delante del lugar”.
En su mensaje, el premier anunció la reanudación de las actividades de la industria manufacturera y la construcción, así como leves moderaciones de las restricciones vigentes para continuar la lucha contra la propagación del coronavirus.
Pero “sigue prohibido movilizarse de una región a otra salvo por razones de salud o por motivos de trabajo de urgencia”, agregó.
Para mantener controlada la difusión del virus, Conte señaló que quien tenga más de 37,5 grados de temperatura deberá quedarse en su casa y que se iniciará un ingreso por cuotas a los parques públicos en las ciudades en que las autoridades locales lo autoricen.
Además, después de más de un mes y medio, el premier anunció una apertura para la celebración de funerales, de hasta 15 personas, y siempre con barbijos y “respetando rigurosamente” el distanciamiento social, al que calificó como “un derecho fundamental de las personas”.
“Gracias a los sacrificios estamos logrando contener la difusión de la pandemia; manifestaron todos, en el norte y en el sur, fuerza, coraje sentido de responsabilidad y de comunidad”, remarcó Conte.
“Ahora empieza para todos la fase de convivencia con el virus y debemos ser conscientes de que la curva de contagios podría crecer, el riesgo está y debemos asumirlo y afrontarlo, pero con método y rigor”, convocó.
El primer ministro insistió en que “la única forma de no enfermarse en esta fase es la distancia social” y advirtió que si no se la respeta, “la curva volverá a crecer y podría salirse de control, aumentarán los muertos” y habrá “daños irreversibles a la economía”.
Por otra parte, Conte anunció que habrá más ayuda para las personas que en abril percibieron subsidios del gobierno para trabajadores autónomos y de actividades estacionales, y prometió medidas especiales para sectores como el turismo, que aporta 15% al PBI del país.
Más temprano, en una entrevista publicada por el diario Repubblica, Conte había anunciado que las clases se reanudarán directamente en septiembre, luego del habitual receso veraniego de julio y agosto.
Asimismo, dijo que el gobierno estaba analizando qué sectores de la economía “estratégicamente” importantes podrán empezar primero a producir, al margen del régimen de habilitaciones locales que ya dio luz verde a cerca de 200.000 empresas en todo el país.